Cosas buenas:
Es un hotel bonito, con habitaciones agradables (aunque bastante húmedas; tienen alfombra estilo americano). La ubicación es muy buena, justo enfrente hay un McDonald’s, lo cual se agradece considerando que no hay muchas opciones para comer cerca —no es como en México, donde hay tacos en cada esquina y el almuerzo no es bueno, le falta sazon al huevo y la salchicha creo que son de varias semanas, pero es justo con el presupuesto no puedes pedir mas. Tiene acceso directo a la playa con control de entrada mediante llave o tarjeta, lo cual se siente seguro. La alberca es pequeña, pero está bien y me gustó.
Cosas malas:
¡El internet! Muy mal. Ni siquiera en el lobby hay una buena conexión. Si no te das cuenta, puedes acabar con tu plan de datos en 2 o 3 horas. Si vienes con la intención de tener reuniones laborales por Zoom (como fue parcialmente mi caso), no lo recomiendo. Con un buen plan de datos se sobrevive, pero definitivamente este hotel está más pensado para descansar y divertirse que para trabajar. ¿ Volveria? creo que no, podria invertir un poco mas y obtener mejores beneficios a cambio...